Los niños pueden aprender muchas cosas a través de distintos caminos y en distintos ambientes. El aprendizaje por observación es una de ellas, realizado a través de la observación e imitación de la conducta de los demás. Ver lo que hacen otras personas adultos o niños, en ocasiones es un aprendizaje inconsciente imitamos lo que vemos, es una forma rápida y fácil de aprender y es una de las formas más habituales y básicas en la infancia. Hemos de tener en cuenta que es uno de los aprendizajes más importantes. Desde la infancia se observa el comportamiento de los adultos y de sus figuras sociales más cercanas, padres, hermanos, amigos, profesores y se reproducen sus conductas. Se adquieren nuevos conocimientos, habilidades, comportamientos, formas de comunicarnos, maneras de relacionarnos, estilos de solucionar problemas, aprender a gestionar emociones, conseguir objetivos etc. En este proceso hay consecuencias positivas y negativas. Por esta razón, es muy importante que el en
“La tarjeta AA “, es un recurso sanitario especial para situaciones definidas. El objetivo es favorecer la accesibilidad y el acompañamiento a personas con discapacidad, en los servicios sanitarios para pacientes que pueden presentar algún tipo de trastorno de conducta, así como a sus acompañantes. Esta tarjeta implica que en la historia clínica del paciente quedará reflejada, la patología reconocida por la que el usuario tiene derecho al reconocimiento del distintivo. A los usuarios de la “Tarjeta Sanitaria AA” se les procuraran ajustes en los tiempos de espera previos a la entrada en la consulta médica y estar acompañados por sus familiares en la consulta, consultas de especializada y servicios de urgencias de ambos ámbitos. La tarjeta permitirá atención más accesible y adaptada a las necesidades de los siguientes colectivos: · Demencia con un nivel de afectación cognitivo al menos moderado y/o trastorno de conducta. · Discapacidad intelec