Leyendo la última entrada del blog de Javier González, me alegró ver el contenido, pues trata sobre le mismo ámbito de intervención que tenía preparada para esta semana, “la familia”. Mi entrada quizá pueda ser complementaria.
Es incuestionable la necesidad de poder establecer una intervención lo más temprana posible, cuando el niño tiene ciertas dificultades en su desarrollo evolutivo. Pero desde los CDIATs, cada día somos más conocedores de que una parte fundamental , del mayor o menor éxito en el tratamiento global, está en la familia, siendo un objetivo prioritario en la intervención de los profesionales de un Cdiat.
La detección temprana, no sólo favorece la intervención precoz sobre el niño, sino también sobre la familia, ya que nos permite orientar y apoyar cuanto antes, a fin de ayudarles a responder con mayor seguridad a las dificultades de sus hijos.
No podemos olvidar que cada niño y cada familia tienen su propia dinámica y por tanto, requiere una atención cuidadosa e individualizada. El terapeuta ha de escuchar las preocupaciones de los padres y conocer las necesidades del niño, con ello ha buscar un cauce por el cual encuentren las claves importantes de una adaptación entre sí, es decir, ha de ayudar a crear la interacciones positivas entre padres e hijo que propicien un desarrollo armónico y adaptado.
La labor de los profesionales de Atención Temprana con los padres tiene variados objetivos:
1. Crear una relación de confianza padre-profesional de la AT.
2. Establecer con claridad cuales son las funciones de la familia; no son terapeutas, son padres y han de aprender a intervenir con su hijo a través del juego, fomentar interacciones sociales, generar pautas de comportamiento y canales de comunicación, en el contexto natural del niño, en sus rutinas, en el hogar etc.
3. Enseñar a observar las potencialidades del niño dando significado a sus conductas y a las respuestas del adulto.
4. Fomentar técnicas de interacción-comunicación.
5. Aumentar la receptividad ante mínimas señales comunicativas del niño.
6. En los primeros años, se espera su presencia en las sesiones. Como agentes activos, no simplemente observadores.
7. Reforzar la percepción de autocompetencia, de que es fácil y placentero lo que hacen y como lo hacen.
8. Explicar las conductas del niño, dar significado a su comportamiento, entender las respuestas.
Responder a las dudas concretas que tienen los padres requiere un abordaje con entrevistas y seguimiento, así como también el compromiso, confianza y colaboración con los profesionales que atienden al niño.
Atencion temprana. Guia_madres_padres_
(lo recomiendo). http://desarrolloinfantilyatenciontemprana.blogspot.com/
Es incuestionable la necesidad de poder establecer una intervención lo más temprana posible, cuando el niño tiene ciertas dificultades en su desarrollo evolutivo. Pero desde los CDIATs, cada día somos más conocedores de que una parte fundamental , del mayor o menor éxito en el tratamiento global, está en la familia, siendo un objetivo prioritario en la intervención de los profesionales de un Cdiat.
La detección temprana, no sólo favorece la intervención precoz sobre el niño, sino también sobre la familia, ya que nos permite orientar y apoyar cuanto antes, a fin de ayudarles a responder con mayor seguridad a las dificultades de sus hijos.
No podemos olvidar que cada niño y cada familia tienen su propia dinámica y por tanto, requiere una atención cuidadosa e individualizada. El terapeuta ha de escuchar las preocupaciones de los padres y conocer las necesidades del niño, con ello ha buscar un cauce por el cual encuentren las claves importantes de una adaptación entre sí, es decir, ha de ayudar a crear la interacciones positivas entre padres e hijo que propicien un desarrollo armónico y adaptado.
La labor de los profesionales de Atención Temprana con los padres tiene variados objetivos:
1. Crear una relación de confianza padre-profesional de la AT.
2. Establecer con claridad cuales son las funciones de la familia; no son terapeutas, son padres y han de aprender a intervenir con su hijo a través del juego, fomentar interacciones sociales, generar pautas de comportamiento y canales de comunicación, en el contexto natural del niño, en sus rutinas, en el hogar etc.
3. Enseñar a observar las potencialidades del niño dando significado a sus conductas y a las respuestas del adulto.
4. Fomentar técnicas de interacción-comunicación.
5. Aumentar la receptividad ante mínimas señales comunicativas del niño.
6. En los primeros años, se espera su presencia en las sesiones. Como agentes activos, no simplemente observadores.
7. Reforzar la percepción de autocompetencia, de que es fácil y placentero lo que hacen y como lo hacen.
8. Explicar las conductas del niño, dar significado a su comportamiento, entender las respuestas.
Responder a las dudas concretas que tienen los padres requiere un abordaje con entrevistas y seguimiento, así como también el compromiso, confianza y colaboración con los profesionales que atienden al niño.
Atencion temprana. Guia_madres_padres_
Aral: muy interesantes, como siempre tus reflexiones. Por los contenidos de tu entrada, creo entender que estamos muy de acuerdo en el modelo conceptual y los objetivos de intervención en relación a la familia. También estaría muy interesado en conocer tu opinión sobre el instrumento de evaluación de familia y entorno. Gracias y Saludos
ResponderEliminarHola Aral, muchas gracias por visitar el blog de Cristina.
ResponderEliminarMe ha gustado la lista que has puesto, aunque nunca la había visto así, muchas de esas cosas son las que hemos ido haciendo con Cristina. Al final entender sus respuestas requiere conocerla y conocernos. Un abrazo. Fernando.