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Castigo o consecuencias

 



La educación actual apuesta por una crianza sin castigos, lo que no implica que no haya limites, normas y consecuencias para educar y controlar su conducta.

Los niños buscan espacios para reafirmarse y en ocasiones, no es fácil aplicar las normas que tenemos. La educación requiere de amor, paciencia y firmeza. La educación es enseñar, guiar y corregir, por lo que las normas y límites son necesarios para que aprendan el camino.

En ocasiones los padres, ante la actuación incorrecta de nuestro hijo y dependiendo del momento emocional en el que nos encontremos actuamos con impulsividad y lo que conseguimos es asustar al niño con el castigo impuesto.

Debemos actuar con disciplina positiva, límites claros y consistentes, aplicando consecuencias a sus actos, enseñando a ser responsable, basándonos en las comunicaciones afectivas con consecuencias naturales, no en el miedo.

Qué diferencias hay entre castigo y consecuencias:

Castigo



El castigo no suele ser respetuoso y responde en ocasiones a emociones, a la improvisación, es arbitrario y no suele ser acorde con  lo ocurrido, con lo cual no es educativo no le enseñamos lo que tiene que hacer, es solo punitivo.

El castigo es percibido por el niño como un acto injusto, produce ira, miedo, desconfianza y endurecimiento del carácter empeorando las relaciones.

El castigo a corto plazo puede ser efectivo, pero a largo plazo es contraproducente, genera rebeldía, falta de comprensión pues no enseña sobre las consecuencias

Consecuencias

El objetivo de las consecuencias es hacerles entender que sus actos tienen efectos sobre los demás, buscan aprendizajes. Son respetuosas pues de forma anticipada saben lo que va a ocurrir después de una conducta concreta que se salta la norma que con anterioridad conocen. Son el resultado del comportamiento realizado, sabiendo cuales eran las normas y limites que no pueden pasar.

 La consecuencia siempre será la misma, no cambian en función del estado de ánimo de los padres, tienen relación con su comportamiento no son arbitrarias.  Deben estar siempre relacionadas con la conducta que han realizado, por lo que han de ser razonables y coherentes. Para lógralo  es necesario que tengan claro cuáles son los límites y normas así como que consecuencias pueden tener el no cumplirlos.


Han de aprender que en la vida no hay premios ni castigos hay consecuencias, así aprenderán de sus errores y aprenderán a resolver las diferentes situaciones que han generado conflicto.



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