La epilepsia infantil es una enfermedad neurológica crónica,
muy común en la infancia, que afecta a muchos niños en todo el mundo. Las crisis
epilépticas no son un diagnóstico por sí
mismas, si no el síntoma de un proceso que resulta de una descarga excesiva de
las neuronas cerebrales.
Epilepsia se presenta como un grupo
de trastornos en los que las crisis convulsivas recurrentes son el síntoma
principal, convulsiones durante breves periodos de tiempo y puede producir
alteraciones motoras con espasmos musculares, de conciencia y de comportamiento.
La evolución es muy variable y
diversa tanto en forma como en gravedad.
Causas de la epilepsia infantil
Las causas de la epilepsia infantil
no están claras, algunas de las causas más
comunes:
- · Predisposición
genética con antecedentes familiares.
- · Lesión
cerebral por daño sufrido al nacimiento, prenatales o perinatales o accidente.
- · Infecciones
severas como meningitis o encefalitis.
- · Trastornos
metabólicos: Que afectan el equilibrio químico del cuerpo.
- · Tumores cerebrales:
Que pueden interferir con la actividad eléctrica normal del cerebro.
- · Traumatismos
craneoencefálicos severos.
- · Accidentes
cerebrovasculares.
El síntoma más común de la
epilepsia infantil son las convulsiones. Que como hemos comentado pueden causar:
- · Pérdida de
conciencia, ausencias, mirada fija
- · Espasmos
musculares con rigidez corporal y movimientos incontrolables de brazos o
piernas
- · Cambios de
comportamiento, irritabilidad.
- · Movimientos
o sonidos extraños y visión distorsionada.
- · Problemas
para concentrarse o prestar atención.
- · Cambios
sensoriales, como alteraciones en la vista o el oído.
- Diagnóstico
Es imprescindible un diagnóstico clínico que se realice a través
de: historia clínica, Electroencefalogramas y también a través de Resonancias
magnéticas.
Es muy importante hacer una
adecuada clasificación del tipo de epilepsia que presenta cada niño. Esto ayuda
a elegir el tratamiento más efectivo con los menores efectos secundarios.
Tratamientos de la epilepsia infantil
En un porcentaje alto los casos de
epilepsia infantil tienen un buen progreso y es posible su control con
medicamentos antiepilépticos respondiendo bien al tratamiento. Muchos niños
pueden llevar una vida normal y activa.
Dependiendo siempre de la causa, la
edad se aportara la medicación y dosis adecuada a cada niño, teniendo en cuenta
la tolerancia de niño a los medicamentos y terapias.
También ayudaran hábitos
saludables, como un adecuado ritmo de sueño, dieta sana, evitar situaciones de
estrés,
La investigación clínica con la
epilepsia ha logrado grandes avances y los pronósticos han mejorado
notablemente.
Es fundamental que los padres trabajen en
estrecha colaboración con los médicos para gestionar esta condición y asegurar
el bienestar del niño.
En ocasiones pueden presentarse
algunos problemas de aprendizaje y será conveniente evaluar por un especialista
en educación las funciones cognitivas.
Comentarios
Publicar un comentario